Hoy en día no dejamos de oír hablar de las competencias digitales, y esto está muy bien, claro que sí; de hecho, desde la Fundación Parentes fuimos de los primeros en implantarlas en los centros de la Red Educativa Internacional. Pero una sociedad para avanzar no solo puede ir al ritmo que marca la última tecnológica, sino que también tiene que mirar para atrás y coger impulso a través de valores clásicos que le han servido al hombre –desde hace miles de años–a la hora de construir el verdadero estado del bienestar y llegar a la plena realización como ser humano. En la Fundación Parentes siendo fieles a nuestro compromiso de “tirar de la sociedad para arriba” a través del fomento de la excelencia académica y la formación en valores humanistas, no dejamos de trabajar por actualizar la comprensión y reflexión de nuestros alumnos sobre esos principios tan básicos, en los que sabemos que se fundamenta la felicidad humana. Para ello también trabajamos mucho los aspectos pedagógicos, sabemos que para ser escuchados por los más jóvenes somos nosotros los que nos tenemos que adaptar a sus canales y a las nuevas formas en las que están dispuestos a recibir la información.

Es imprescindible que junto al proyecto académico trabajemos en competencias que refuercen el autoconocimiento y pensamiento crítico de grandes y pequeños, tan necesarios en las siguientes etapas de su vida social y profesional. Por eso, os anunciamos que estamos trabajando con mucha ilusión en un nuevo proyecto que fomenta desde las aulas habilidades sociales relacionadas con el liderazgo y adaptadas a cada etapa del aprendizaje.

Por suerte, en algunos de nuestros centros, como en el caso del Colegio Los Pinos en Quito, se trabajan desde hace años estas habilidades con las alumnas. Competencias como el complejo sentido de la resiliencia se aborda en el aula para ayudar a las alumnas ecuatorianas a adaptarse a las dificultades y a sobreponerse a las situaciones difíciles de la vida.  El equipo docente espera, al menos, que mantengan la idea clara de que “el dolor es inevitable, pero el sufrimiento es opcional”. Os dejamos aquí el artículo para que comprobéis cómo trabajan estas situaciones:

PINCHA AQUÍ PARA IR AL ARTÍCULO